lunes, 11 de febrero de 2008

Leon: Danzantes de Pobladura de Pelayos

Danzantes de Pobladura de Pelayos

El entierro del Entroido

Desfiles de comparsas y carrozas cierran la fiesta en las ciudades
ÓSCAR IGLESIAS - Santiago - 06/02/2008



El fin del Entroido comenzó ayer en las ciudades con los desfiles urbanos de comparsas y carrozas. En Compostela, alrededor de 3.000 personas se arracimaron en torno a la Praza de Galicia, dispuesta como un escenario de concierto, para contemplar el avance de 30 comparsas, 8 carrozas y hasta 20 disfraces colectivos.

Laza despidió el Carnaval con las carreras de peliqueiros jubilados
En la cabalgata del Entroido institucional de Santiago, con una primera carroza tuneada con transiciones de techno grueso, resultaba difícil identificar alguno de los referentes -rurales- de la fiesta en Galicia. Muy pocos disfraces, a excepción de los niños, generalmente embutidos en trajes de confección, distinguían el motivo comercial de la fiesta que concluye. Al mismo tiempo que los compostelanos combatían el frío, Ferrol y Lugo organizaban sus principales desfiles. En A Coruña, donde se reparten más de 60.000 euros en premios, se celebró en A Torre, barrio de Monte Alto, la festa choqueira, una de las citas urbanas más divertidas de Galicia: la gente se disfraza de cualquier manera.

Más hacia el interior, la lluvia alteró el calendario en la mayoría de los puntos clave del Entroido etnográfico. En A Estrada, el Alto dos Xenerais volvía a la Praza da Constitución, y en Verín todavía pensaban desquitarse los cigarróns. Laza despedía el Entroido con las carreras de los peliqueiros jubilados y el testamento. En Xinzo salieron también las pantallas para juzgar a los civiles sin disfrazar.

Al margen del triángulo mediático del Entroido ourensano, las mejores noticias llegan de Maceda, capital histórica de la Alta Limia. Poetas como Claude Royet-Journoud o James Sacré -Se os felos atravesan polos nosos poemas- ya habían presenciado las escenificaciones de los felos, la máscara tradicional del Entroido de Maceda -semejante al peliqueiro-, invitados por el escritor orensano Emilio Araúxo. Este año llegarán a Amastra-N-Gallar, la editorial de Araúxo, los poemas de felos del chino Yao Feng y de la rusa Rea Nikonova.

"El mito de los orígenes se multiplica y se matiza en función de la promesa poética que cada colectivo de máscaras es capaz de relanzar", recuerda Araúxo. "Y aquí los felos se decidieron por los animales de la Sierra de San Mamede", los mismos que llevan en la mitra que corona la careta. Araúxo, responsable de un trabajo ingente de recuperación de sentido en el rural, remite al felo para preguntarse si la poesía "es quien de traducir estos conocimientos, encriptarlos y transmitirlos".

El mito aplicado a las máscaras del Entroido gallego, que ocupó a los etnógrafos de la Xeración Nós, situó las mitras de peliqueiros o felos, como La Morena de Laza, entre el mundo celta, Roma y los recaudadores de impuestos del siglo XVI, en lo que sería, siguiendo esta teoría, una verdadera inversión popular del sentido aristocrático de aquellos cobradores que se ocultaban para cobrar el dinero de los condes. Al Oso de Salcedo, en Pobra do Brollón, a punto de ser incluido en el ramillete de fiestas de interés turístico, acudió también este año el etnólogo francés Robert Bosch.

Federico Cocho, en O Carnaval en Galicia (Xerais, 2008), analiza la pervivencia y los diferentes matices de la fiesta que hoy acaba. En la mayoría de las celebraciones -urbanas o no-, incluidos los boteiros de Viana y Vilariño de Conso, o las mázcaras de Manzaneda, en Ourense, se entierra hoy el Entroido

domingo, 10 de febrero de 2008

Botargas: Gajanejos recupero sus Vaquillas


David Sierra. 29/01/2008 La Botarga de este municipio dejó de salir en la década de los años 50 y ahora un grupo de jóvenes la ha recuperado con el apoyo del Consistorio.

Como muchos otros pueblos de la provincia de Guadalajara, el Carnaval era una fiesta con mucho arraigo en Gajanejos. Durante esta celebración, salían a las calles Los Vaquillas, que es como en este pequeño pueblo de la Alta Alcarria se llama a las botargas, vestidos de colores vivos, con una careta emulando al demonio, una horca en la mano, y cencerros a la cintura.

Durante la década de los 50, Gajanejos perdió esta entrañable tradición y hoy un grupo de jóvenes del pueblo, con el apoyo del Ayuntamiento, se han decidido a recuperarla. La fiesta tendrá lugar el próximo sábado 9 de febrero, en un espacio conocido como El Pabellón, en el Pueblo Viejo de Gajanejos.

PROGRAMA 2007

13:00 Juegos para niños
14:00 Comida Popular
16:00 Campeonatos: Mus, Brisca y Trivial
21:00 Cena y disfraces
23:00 Discoteca Móvil
00:30 Concierto “Los Bodegos”

Más información en
www.gajanejos.com

miércoles, 6 de febrero de 2008

CARNAVAL-GALICIA - La procesión de santos Entroido y Entroida de Covelo atrae visitantes pese a la lluvia

Agencia EFEMartes, 5 de febrero 2008

La procesión de los santos Entroido y Entroida del pueblo de Covelo atrajo hoy, pese a la lluvia, a numerosos visitantes procedentes de la comarca del Ribeiro, de Pontevedra y de A Coruña para participar en esta peculiar celebración del martes de Carnaval.

La procesión, según explicó a Efe el vecino Raúl Vázquez, de 28 años, se abre con el paso de un carro tirado por las vacas "Gallarda" y "Pinta", que es un altar para los santos Entroido y Entroida -dos muñecos de paja vestidos con ropas de hombre y mujer- "a los que se reza y se hacen ofrendas como a cualquier otro santo", matizó.

El carro comenzó la procesión en medio del pueblo de Covelo -de cien habitantes- y lo cruzó mientras subía por la ladera de la montaña hasta llegar al alto, llamado "coto da Raña", seguido por el "ramo", que es una rama de laurel en la que se cuelga una gran rosca dulce, una ristra de castañas secas y una calabaza.

Detrás de los santos y del ramo, el rey del Entroido fue a caballo custodiado por cuatro "mayordomos" y cuatro "danzantes" que le protegieron, durante todo el camino, de los sucesivos ataques de los cuatro "soldados" que intentaron arrebatarle la corona continuamente.

El cortejo procesional se completó con un vecino vestido de "bobo" al que todos tiraron tierra y empujaron durante el recorrido, otro que llevó una bandera y un grupo formado por "jueces", "procuradores" y "fiscal" que supervisaron la celebración para que cumpla con la tradición.

Raúl Vázquez, explicó, es "danzante" desde hace doce años y señaló que su papel es muy importante para él, ya que ayuda a mantener esta tradición a la que nadie sabe poner fecha de inicio "y es la fiesta de los santos propios del pueblo", subrayó.

El recorrido comenzó después del lanzamiento de varios fuegos de palenque y tras el grito "¡Viva o Entroido ou queremos que morra!" del rey, que fue respondido por los participantes y asistentes con un "¡Que viva, que viva!".

A partir de ese momento, toda la comitiva inició el ascenso hasta el "Coto da Raña", con la lucha entre los defensores y atacantes del rey y regresaron al pueblo, donde pararon casi en cada casa para que los "danzantes" bailasen unos minutos al ritmo marcado por una charanga musical.

En cada casa, los residentes ofrecieron una jarra de sangría y bandejas de dulces y comida a los integrantes de la procesión para que repusieran fuerzas antes de seguir su camino por todo el pueblo hasta llegar al atrio de la iglesia, donde el rey subastó huevos, cabezas de cerdo, tocino, chorizos, velas de gran tamaño y frutas recopiladas en el pueblo.

Con el dinero obtenido en la subasta de los lotes, según recordó a Efe el vecino Manuel Francisco Carreiro, se organizará la fiesta del próximo año y se pagará a las orquestas que amenizan el baile de estos días.

Carrero recordó que, hasta hace unos 15 años, los vecinos del pueblo de Vivenzo -en la montaña cercana- celebraban el martes de Carnaval de una forma similar a los de Covelo.

"De hecho, competíamos para ver qué procesión empezaba antes, por lo que los lanzadores de los fuegos madrugaban para vigilarse de una loma a otra", detalló.